He escuchado muchas veces decir que hay cosas que ya no tienen posibilidad de cambio, como por ejemplo, la muerte física. Comparto que esto es así, sin embargo, hay algo que sí puedo cambiar: mi visión de las circunstancias.
Podemos victimizarnos y eternizarnos en el sufrimiento o elegir tomar una postura que nos permita continuar de un modo mas ameno con la situación, proceso que generalmente no es rápido, pero definitivamente posible.
Tal cual sostengo en mi portada, sé que se puede estar mejor y que cada uno de nosotros decide hasta donde lo desea. Siempre hay salida, siempre hay posibilidad de cambio si estamos abiertos a escuchar, a observar, ya que no siempre la "guía" viene por donde la esperamos, esta puede tomar diversos caminos e interlocutores.
Bastará con tomar contacto unos minutos con nosotros mismos a través de la meditación, unas respiraciones conscientes o simplemente contemplando la naturaleza para empezar a escuchar las sensaciones, imágenes y/o mensajes que llegan a nosotros. Serenar la mente, aquietar los sentidos, "despertar" el alma!
Cuando cambiamos nuestra visión cambia automáticamente la realidad, nuestro pensamiento puede virar 180 grados con respecto a una circunstancia, solo hay que preguntarse: estoy dispuesto? tengo verdaderamente el deseo de "salir" de donde me encuentro?
Hay lluvias muy fuertes en el camino... yo elijo escucharlas y contemplar la belleza que brinda el posterior arco iris.
Hasta pronto, Ana.